
Ha llegado el verano. Las consultas audiológicas ralentizan su ritmo hasta la llegada de agosto, por regla general, el mes con menos actividad audiológica en un país como España. Son las costumbres vacacionales impuestas, en buena medida, por la climatología. Siguiendo esta corriente, los audiólogos también anhelan su merecido descanso. Tras meses de consulta diaria, de trabajo sin cuartel, por fin se divisan unos días de asueto. Es el momento de descansar.
En 2019 CareerCast.com incluyó en su inventario de «las 10 profesiones con menos estrés» a la audiología. Sin embargo, y más a estas alturas del año con el descanso a las puertas, muchos audiólogos sienten que esta clasificación no se corresponde con su realidad. Tras un análisis minucioso de estas listas se puede entender el «lugar privilegiado» de la audiología.
Los investigadores que realizan estos rankings no pueden medir más que un grupo de aspectos de los temas que se están investigando. La elección de estos factores influye en los resultados. En este caso, los elementos analizados para categorizar el estrés en las profesiones son: viajes, plazos, competitividad, demandas físicas, condiciones ambientales, vida propia y/o ajena en riesgo, etc…
Estudios específicos del ámbito de la audiología han concluido que la mayoría de los audiólogos describen sus condiciones de trabajo como desfavorables, con riesgo de agotamiento.
Sin embargo, estudios específicos del ámbito de la audiología (Brannstrom et al., Manchaiah et al.) han concluido que la mayoría de los audiólogos describen sus condiciones de trabajo como desfavorables, lo que supone un riesgo de agotamiento. Los participantes de estos estudios percibían que el esfuerzo no se correspondía con la recompensa. Parece pues, que los audiólogos sufrimos de igual manera esta situación, que, a todas luces, apunta a ser un problema global en el siglo XXI. El último informe realizado por ADP® Research Institute, en 2022 concluye que el 66% de los trabajadores españoles experimentan estrés en el trabajo al menos una vez por semana.
¿Qué es el estrés ocupacional? Se denomina así a las reacciones físicas y emocionales nocivas que ocurren cuando las exigencias del trabajo no igualan las capacidades, los recursos o las necesidades del trabajador. Una situación de estas características puede deteriorar el clima organizacional. El estrés ocupacional es la segunda causa de baja laboral en Europa. Consecuencias de esta situación son el burnout, la fatiga por compasión y la reducida satisfacción por compasión.

No es el objeto de este artículo el análisis crítico de la situación profesional de los audiólogos. Sin embargo, la revisión de estos estudios permite examinar los factores de riesgo que generan estrés y fatiga profesional a los que nos exponemos. Este artículo de revisión bibliográfica analiza las causas que contribuyen a desarrollar fatiga profesional en el momento actual. Siendo capaz de identificar sus características y los signos de alarma, será más fácil su prevención.
El informe ADP® Research Institute de 2022 concluye que el 66% de los trabajadores españoles experimentan estrés en el trabajo al menos una vez por semana.
Si bien ya existían análisis previos, desde 2019 han proliferado los estudios que examinan el estrés ocupacional de los audiólogos a través de variables como la satisfacción laboral y el efecto burnout en la profesión audiológica.
En 2021 Diana C. Emanuel y Zimmermann publicaron dos artículos basados en entrevistas directas a audiólogos. Las encuestas, utilizaban cuestionarios de preguntas abiertas como por ejemplo: ¿cuáles son los principales impulsores de su estrés? El análisis de estas repuestas permitió inferir los factores mayoritariamente aludidos y ordenarlos de mayor a menor con relación al porcentaje de audiólogos que había mencionado esa causa:
— Estrés asociado a la demanda de tiempo 68%.
— Contacto con el paciente 54%.
— Trámites administrativos 43%.
— Finanzas 39%.
— Falta de apoyo 32%.
— Relaciones con los compañeros 25%.
— Conciliación de vida laboral y familiar 18%.
En 2012 Sevrn et al., investigaron el estrés ocupacional asociado a la profesión del audiólogo a través de dos herramientas: el Audiologist Occupational Stress Questionnaire (AOSQ; Severn, Searchfield y Huggard, 2012), desarrollado para evaluar los tipos y la gravedad del estrés ocupacional en audiólogos, y el ProQOL (versión 3) (The professional quality of life instrument, Stamm, 2015). En sus conclusiones se enumeran como factores de estrés y fatiga profesional aspectos encontrados en los estudios de 2021:
— Demanda de tiempo.
— Agotamiento, fatiga por compasión e insatisfacción por compasión.
— Gestión audiológica.
— Contacto con el paciente.
— Protocolo clínico.
— Responsabilidad del paciente.
— Gestión administrativa y equipos.
En todos los estudios se describe como factor más estresante la demanda de tiempo. Es sin duda el factor que ocasiona más estrés y, por ende, las consecuencias negativas. Este aspecto hace referencia a la escasez de tiempo para llevar a cabo el trabajo audiológico siguiendo las indicaciones de los protocolos (atención al paciente) y las gestiones administrativas derivadas de ese trabajo: anotación de historia clínica, rellenado de formularios, envío/recepción de correos, análisis de la información previa aportada por el paciente, consultas a laboratorios, elaboración de informes… Con relación a este aspecto, las investigaciones hablan de un fenómeno constante que el audiólogo debe afrontar y que en sí mismo aumenta la sensación de estrés: «el dilema ético». La falta de tiempo hace que el especialista tenga que decidir a menudo si reducir las pruebas y cuidados de sus pacientes a niveles más básicos para atender a los requerimientos administrativos, o proporcionar la mejor atención posible en detrimento de la gestión administrativa, o bien utilizando tiempo fuera de sus horarios laborales.
Decíamos unas líneas más arriba que las consecuencias del estrés ocupacional asociado a las profesiones sanitarias (Magraith, 2005) y más concretamente a la audiología son el burnout, la fatiga por compasión y la reducción de la satisfacción por compasión.

El estrés ocupacional es la segunda causa de baja laboral en Europa y consecuencias de esta situación son el burnout o la fatiga por compasión.
La demanda de tiempo está directamente relacionada con la baja satisfacción por compasión y agotamiento. El estrés asociado al contacto con el paciente es el motivo más fuerte de la fatiga por compasión.
La fatiga por compasión resulta de presenciar de manera constante el trauma experimentado por otras personas: vivir el proceso de diagnóstico de un hijo o propio o ser testigos de los procesos de duelo y aceptación de patologías asociadas a la hipoacusia, arrastra consecuencias negativas para el audiólogo como el miedo, la angustia, la dificultad para dormir o la excitación.
La satisfacción por compasión es el placer que uno obtiene al hacer bien su trabajo. La reducción de la satisfacción por compasión en especialidades sanitarias trae consecuencias negativas como: la reducción del placer y la satisfacción laboral, la negatividad hacia los demás, incluidos los compañeros, y el sentido reducido de la contribución al trabajo global del centro.
Estrechamente unido a estos dos fenómenos encontramos el burnout identificado con el agotamiento, la reducción de la realización personal y profesional, los sentimientos de desesperanza, la desconexión y las dificultades para afrontar el trabajo o para hacerlo de manera efectiva (Stamm, 2009).
Otro aspecto analizado en los estudios más recientes (Simpson, 2018) es el clima moral del entorno de trabajo. La percepción del clima moral en el trabajo incide en el nivel de estrés laboral. Cuando hablamos de clima moral nos referimos a la forma en que los valores impulsan la toma de decisiones sanitarias, respaldan la práctica ética e impactan en el entorno laboral de los trabajadores (Rodeny, 2006). Los estudios sugieren que, en general, los audiólogos sienten que trabajan en entornos éticos positivos. El tema más significativo asociado con un clima moral deficiente fue descrito como «presión para cumplir con los objetivos de ventas», si bien los audiólogos entendían y aceptaban la simbiosis entre la industria y el negocio, y la audiología.
Otras conclusiones interesantes de estos estudios son las relacionadas con la población a la que se atiende. La asistencia a la población pediátrica genera mayores niveles de estrés en los audiólogos que la asistencia a la población adulta. Así mismo, los estudios concluyen que en los centros con mejor dotación de equipos y recursos se experimentan menores niveles de estrés laboral y que los audiólogos empleadores sufren más estrés laboral que los audiólogos empleados.
Sin restar importancia a los factores aludidos hasta el momento, recuperemos el factor que más incide en los niveles de estrés laboral en audiología: las limitaciones de tiempo. Los audiólogos describen que son responsables de atender pacientes de forma consecutiva, en ocasiones al tiempo que se atienden visitas adicionales sin cita previa, se gestiona el papeleo asociado a estas visitas, las llamadas de pacientes y proveedores, la respuesta a correos electrónicos, la elaboración de informes a especialistas y pacientes y un largo etcétera de actividades paralelas a la consulta.
La falta de tiempo es el mayor factor de estrés para el audiólogo porque debe decidir si reducir las pruebas y cuidados de sus pacientes o proporcionarles la mejor atención en detrimento de la gestión administrativa.
Diana C. Emanuel concluye que, en estas condiciones, la atención óptima, basada en la evidencia y centrada en el paciente (por ejemplo, más tiempo dedicado al asesoramiento o para llevar a cabo medidas REM) resulta complicada de llevar a cabo, pues convive con otras tareas estresantes u onerosas que restan tiempo. A la vez, abre un debate planteando formas de solucionar o al menos aligerar este factor de estrés: ¿qué tareas de las descritas deseamos retener los audiólogos y cuáles preferimos delegar con el fin de reducir el estrés en nuestro lugar de trabajo? De acuerdo con la autora del estudio, la lógica dicta una división del trabajo para que las intervenciones sean eficientes, con roles en la consulta asociados con la formación, experiencia y salario. La figura del asistente encaja en un modelo diferente de servicio clínico en el que el audiólogo asume las competencias de la atención clínica y delega en el asistente las tareas administrativas gravosas, pero menos especializadas.
Hay evidencia que sugiere que la profesión de la audiología necesita una revisión. Estudios de proyección de la fuerza laboral del audiólogo encontraron una deserción más alta de lo esperado de los audiólogos en la mitad de la carrera (Windmill et al.).
Quick et al., (2016) concluyen que una cantidad moderada de estrés tiene un impacto positivo en la motivación y el rendimiento (estrés positivo o eustrés). Sin embargo, la exposición crónica a altos niveles de estrés tiene consecuencias a largo plazo en la salud mental y física.
Quizá en el descanso estival podamos reflexionar sobre cuáles de los factores expuestos sentimos en nuestro día a día y de qué manera podemos modificar o reducir el estrés que nos provocan, siendo tal vez necesario replantearnos nuestro modelo de servicio o introducir ajustes en él.

Referencias
Severn MS, Searchfield GD, Huggard P. Occupational stress amongst audiologists: compassion satisfaction, compassion fatigue, and burnout. Int J Audiol. 2012; 51(1):3-9. doi:10.3109/14992027.2011.602366
Occupational stress and audiologists. Diana C. Emanuel, G. Muller April 2022. Audiologyon line.
CV Autor:

Audióloga / Audioprotesista
Diplomada en Logopedia.
Habilitación Tinnitus & Hyperacusis Therapy MC.
Experta en Acúfenos e Hiperacusia, tratamiento TRT, Audiología Infantil y Tercera Edad en RV Alfa Centros Auditivos.
Docente en el Máster de Audiología de la Universidad Europea Miguel de Cervantes.