Cuando nos ponemos al volante de un vehículo somos conscientes de la importancia de estar alerta para evitar posibles situaciones de peligro y practicar una conducción segura. Una gran parte de la información que recibimos al conducir la percibimos a través de la vista y no dudamos en utilizar gafas o lentillas para asegurarnos una buena visibilidad. Sin embargo, quizá no valoramos lo suficiente todo lo que nos aporta una buena audición para circular con seguridad. Muchos estímulos en el coche nos llegan a través de señales acústicas: el sonido de un claxon, un frenazo, el ruido del motor de otro vehículo aproximándose, una ambulancia que pide paso o el sonido de algo que no funciona bien en el propio automóvil, son solo algunos de los ejemplos más cotidianos.
A partir de los 50 años la presbiacusia afecta a todo el mundo, en mayor o menor medida, y es importante detectarla lo antes posible.
Por este motivo, las personas con problemas de audición, si bien pueden obtener o renovar su permiso de conducir sin problemas, conviene que sigan algunas recomendaciones de los expertos en Audiología para asegurarse de que no se produzcan contratiempos en sus desplazamientos:

— Si la pérdida auditiva requiere del uso de audífonos, estos deben tener un buen mantenimiento, tanto con las revisiones recomendadas, como con el cuidado diario de los mismos. Hay que verificar el estado de las prótesis auditivas antes de un viaje largo y se deben llevar pilas de repuesto si no se dispone de baterías recargables. Si fuera necesario cambiar las pilas durante el trayecto, debería hacerse de forma segura, deteniendo el vehículo en una zona habilitada para ello.
— Si no se encuentran cómodos con los audífonos a la hora de conducir, se recomienda acudir al audioprotesista para que este le pueda realizar los ajustes necesarios a los sonidos de tráfico más comunes.
— Asimismo, si se cambia de prótesis, es recomendable probarlas unos días antes de viajar para adaptarse a sus nuevas características.
— Otro consejo importante es bajar el volumen de la radio para captar mejor aquellos sonidos que puedan ser decisivos a la hora de prevenir un accidente o colisión. Si van más pasajeros en el coche, deben ser conscientes de la pérdida de audición del conductor para que procuren mantener conversaciones calmadas, sin elevar la voz.
Aproximadamente, a partir de los 50 años la presbiacusia afecta a todo el mundo, en mayor o menor medida, y es importante detectarla lo antes posible. Además, el exceso de ruido y la exposición a elevados decibelios de los jóvenes está provocando una pérdida de audición precoz.
La mejor recomendación es realizarse revisiones auditivas con cierta frecuencia para detectar cualquier problema de audición y poder ponerle solución para no bajar la guardia al volante.