La importancia del cribado neonatal auditivo en el desarrollo cognitivo
Autor: Natus
El cribado neonatal auditivo es una prueba que se lleva a cabo con todos los niños que nacen en España antes de recibir el alta médica. Así, en el primer día o incluso, solo horas después de su nacimiento, se les practica un screening para verificar que tienen audición.
El Programa de detección precoz de la hipoacusia fue impulsado por el European Consensus Development Conference on Neonatal Hearing Screening en 1998, por la Comisión para la Detección Precoz de la Hipoacusia Infantil (CODEPEH) en 1999 y por la American Academy of Pediatrics en 2000. No obstante, hasta el año 2003 no se implanta en España.
Las pruebas que se efectúan al neonato dependen del protocolo de cada Comunidad Autónoma. En algunas, el cribado se realiza mediante otoemisiones, en otras, estas se combinan con los potenciales de screening.
En el Hospital Quirón salud Sur de Alcorcón, además de realizar la prueba de potenciales auditivos evocados de tronco cerebral automatizados a todos los neonatos, se practica la prueba de otoemisiones a niños expuestos a medicamentos ototóxicos o cuando se sospecha que no oyen correctamente.
MADSEN AccuScreen es uno de los equipos que permite practicar ambas pruebas, potenciales y otoemisiones, de forma rápida, inocua y fiable. Este es el equipo que se utiliza en el Hospital Quirón salud Sur.
Que no supere inicialmente la prueba del cribado neonatal, no quiere decir necesariamente que el bebé no oiga bien. «Los niños, a veces, no pasan la prueba porque puede haber una inmadurez del sistema auditivo, por ejemplo», afirma Pablo de Lucas, ORL de este Hospital. Entonces, se deben practicar pruebas adicionales, como una timpanometría para confirmar el diagnóstico.
«El cribado neonatal es fundamental para un perfecto desarrollo del bebé. Cuando su práctica no era aún obligatoria, había casos en los que se tardaba años en detectar la pérdida auditiva, lo que implicaba un retraso en el desarrollo del lenguaje, pero es que, además, cuando se demora el diagnóstico, se compromete el resultado del tratamiento», afirma el doctor Pablo de Lucas.