FAQ’s Nº30

Somos conscientes de que la anamnesis, que supone una recopilación detallada de información sobre la historia clínica de un paciente, es un paso de gran relevancia para ayudar a los profesionales de la salud a diagnosticar y tratar de manera efectiva y personalizada a sus pacientes. Pero ¿sabemos si la estamos realizando correctamente?
¿Cuál es el significado de la anamnesis?
Es el proceso mediante el cual el profesional sanitario obtiene datos del paciente a través de un diálogo, para averiguar así los motivos básicos por los cuales acude a nosotros. Esta información se adquiere preguntando acerca de sus hábitos de vida y antecedentes familiares o personales, con el objetivo de establecer un diagnóstico del problema a tratar.
De hecho, la anamnesis representa la primera fase de la visita para que el profesional sanitario pueda enfocar y tratar el problema que sufre el paciente.
El desarrollo posterior de este proceso asistencial nos permite detectar posibles síntomas que expresa el paciente, así como los que omite o desconoce. Por lo tanto, es muy importante no solo estar pendiente de lo que dice, sino también de cómo lo dice y de la comunicación no verbal que realiza, para, incluso, ver la importancia que concede el propio afectado respecto a su problema.
Se debe realizar directamente al paciente, aunque, en ocasiones, resulta muy recomendable llevar a cabo este proceso también con los familiares o personas allegadas para obtener una visión más concreta e imparcial de su sintomatología.
La anamnesis representa la primera fase de la visita para que el profesional sanitario pueda encaminarse y tratar el problema que sufre el paciente.
¿Cómo hacer la anamnesis?
Para hacer una correcta anamnesis, el diálogo establecido entre profesional y paciente tiene que recopilar ciertos datos que deben reflejar aspectos esenciales. Concretamente han de aparecer los siguientes detalles:
— Identificación: se deben recoger los datos básicos de la persona, tales como el nombre, la fecha de nacimiento, la dirección y el teléfono. Si es posible obtener más de un número de contacto para futuros avisos, sería ideal.
— Motivo de la consulta: se debe dejar constancia de la razón por la cual el paciente acude a la consulta, anotando la problemática principal.
— Historia de la problemática actual: es esencial para comprender totalmente la situación del paciente y cómo su problema lo limita en la vida cotidiana. Además, aquí se deberá recoger cuándo ha comenzado la pérdida auditiva, el acúfeno o la dolencia que presente. Es importante también saber qué causas considera el paciente que se la han provocado, así como los síntomas que presenta.
— Influencia en la vida personal: los problemas auditivos que declaran los pacientes tienen su efecto y su consecuencia en su vida cotidiana; normalmente suponen un efecto negativo. De hecho, esta problemática repercute de manera transversal con sus relaciones sociales, laborales o familiares. Es muy importante saber la limitación que le causa su problema porque nos va a ayudar a la hora de establecer el tipo de estrategias a emplear, con el objetivo de aportar soluciones y con la intención de devolverle la calidad de vida que tenía antes de la aparición de la pérdida de audición.
— Antecedentes personales: es fundamental conocer patologías o problemas que el paciente ha padecido anteriormente, así como saber las consecuencias que estos han tenido, ya que acotará en gran medida el diagnóstico y la posible solución.
— Antecedentes familiares: es importantísimo conocer las patologías que han presentado los familiares del paciente si se saben, ya que, en muchos casos, reduce el tiempo del diagnóstico si resultan ser genéticas.
— Valoración del problema: «a priori» acudirán al centro personas con disfunciones auditivas, pero cada caso debe ser analizado y tratado de forma individual. Ningún paciente es igual a otro, aunque presenten cuadros semejantes de la problemática, por lo que el audioprotesista no debe dar nada por sentado, ya que esto podría dar lugar a errores a la hora de la elección del audífono y su posterior adaptación.


Es muy importante saber la limitación concreta que causa el problema auditivo en el paciente porque nos va a ayudar a establecer el tipo de estrategias a emplear y a devolverle la calidad de vida que tenía.
Pero… ¿Cuánto tiempo le dedicas a la anamnesis?
Seguro que muchas veces, por rutina o falta de tiempo, no prestamos suficiente atención a esta parte esencial de la visita de nuestros usuarios.
La información que el audioprotesista puede obtener durante la anamnesis le permite conocer diversos datos relevantes que le van a ser de extraordinaria utilidad para establecer el diagnóstico, así como en la elección del audífono que sea la mejor solución respecto a la pérdida auditiva y estilo de vida del cliente. A la hora de adaptar, no es lo mismo una persona que trabaja en ambientes ruidosos, que otra que vive una vida más relajada y sin alteraciones.
Como hemos explicado en el punto anterior, la anamnesis nos ofrece información importante acerca de la existencia de alguna enfermedad que pueda estar padeciendo el paciente, por lo que dicha prueba es un proceso que debemos dominar a la perfección y no saltárnoslo ni pasarlo a la ligera, ya que una buena realización nos permitirá ser más eficientes. Además, ahorraremos tiempo en la adaptación de los audífonos evitando la repetición de pruebas auditivas. Realizar preguntas como las que sugerimos a continuación, nos va a orientar sobre la correcta elección del audífono y con ello, nos garantizará la satisfacción por parte del usuario al haber acertado con la prótesis seleccionada:
— ¿Cada cuánto sales a cenar con amigos?
— ¿Sueles frecuentar lugares con ruido?
— ¿Qué tal escuchas al cura en misa?
— ¿Te gusta ir a conciertos o escuchar música en directo?
— ¿Ves mucho la TV?
— ¿Te molestan los ruidos?
Estas son solo algunas de las cuestiones más relevantes, pero según lo que te revele el paciente, deberás adecuarlas a su entorno.
Es importante dejarle claro que las preguntas que realizamos las hacemos con el fin de obtener la mayor satisfacción para su problema y, en ningún momento, para entrometernos en su vida personal.
Hay que entender la relación profesional-paciente como un mecanismo para mejorar el tratamiento; si no hay avances, se puede producir una pérdida de confianza en el audioprotesista.
Consejos para tener una buena relación audioprotesista-usuario
En primer lugar, hay que entender que la relación profesional/paciente debe ser interpretada como un mecanismo para mejorar el tratamiento y, por tanto, su salud. Si con el paso del tiempo, no aprecia mejoras respecto a su estado, esto puede suponer una pérdida de confianza del paciente en el profesional, que perjudicará, probablemente, su implicación en el uso de los audífonos y, por consiguiente, la mejora de su salud auditiva.
Para evitar estas situaciones de desconfianza de los pacientes y facilitar su comprensión y adaptación al uso de los audífonos, los profesionales deberían de implementar las siguientes pautas:
— Promover un lenguaje bidireccional que facilite la comprensión, evitando palabras excesivamente técnicas.
— Preguntar directa e indirectamente sobre aspectos de la vida del paciente.
— Promover un clima de confianza mutua.
— Adoptar nuevos canales de comunicación que hagan el proceso comunicativo mucho más fluido, si fuera necesario.
— Conseguir una buena adherencia por parte del paciente y evitar el rechazo de los audífonos.
— Fomentar hábitos de vida saludable, claves si sufre enfermedades patológicas como la diabetes, que genera fluctuación de audición, o de cara a evitar la exposición a lugares ruidosos.
En definitiva, una correcta anamnesis y tener una buena relación con el paciente va a repercutir muy positivamente en su calidad de vida, y un cliente contento, siempre es una victoria.
El correcto uso de audífonos va a generar una mejora importante en la salud auditiva de la persona y de todo aquel que le rodea. Además, va a significar un gran avance para futuras dolencias o empeoramiento de audición que pueda presentar el paciente, estén relacionadas o no, ya que la percepción que va a tener el usuario sobre el audioprotesista que le atiende y que se preocupa por su salud, va a ser muy positiva, trayendo consigo éxitos profesionales.


Bibliografía
Teixidó, D. B. (2022, 8 junio). Una buena relación médico-paciente mejora la adherencia de los pacientes. Blog de Uniteco. https://www.unitecoprofesional.es/blog/buena-relacion-medico-paciente-mejora-adherencia-pacientes
Teixidó, D. B. (2022b, octubre 19). Una buena anamnesis es clave en el diagnóstico del paciente. Blog de Uniteco. https://www.unitecoprofesional.es/blog/buena-anamnesis-clave-diagnostico-paciente

Audióloga / Audioprotesista
CV Autor
Técnico Superior en Audiología Protésica.
Gerente de Auris Audición e Visión.
Escritora colaboradora del libro Gestión de Empresas.