La vida sigue…
Autor: Redacción GA
Si hay algo certero en la pandemia que hemos sufrido (y seguimos sufriendo) en los últimos meses, es que las personas de más edad son las más vulnerables al coronavirus y que la mortalidad más alta se da entre la población de edad avanzada.
Según los últimos estudios epidemiológicos, estas tasas de letalidad se sitúan en el 5% dentro del rango de edad de entre 60 y 70 años, cifra que asciende al 14% a partir de los 70 y con más 80 años, alcanza un porcentaje del 20%.
En España, el número de personas que superan los 65 años se sitúa alrededor de los nueve millones. Somos conscientes de que gran parte de este colectivo es el cliente habitual de los centros auditivos. Hablar de ellos es hablar también sobre la profesión de los audioprotesistas que contribuyen con su trabajo diario a que aquellos que sufren pérdida de audición a causa de la edad, puedan relacionarse y comunicarse con su entorno. Son personas a las que los años no les frenan y quieren seguir disfrutando de una buena calidad de vida, derribando estereotipos y mostrándose vitales e independientes.
Durante estos meses, desde muchos gabinetes se ha continuado a su lado para evitar que tuvieran que aislarse aún más de lo que las circunstancias tan excepcionales vividas nos han obligado a todos. Los audioprotesistas, conocedores de la necesidad de su labor, han sabido adaptarse a las circunstancias y han creado entornos seguros para poder realizar el ajuste o adaptación de los audífonos a través de las nuevas tecnologías (asistencia en remoto), con atención bajo cita previa o, incluso, trasladándose al hogar del paciente, siempre bajo los protocolos higiénico-sanitarios esenciales.
Desde estas páginas y en representación de la gran familia de la Audiología en España, queremos rendir un afectuoso homenaje a todos los que han sido amigos y pacientes a lo largo de estos años y a los que les ha tocado librar una triste batalla, demostrando, una vez más su valentía y su fuerza.